El acondicionamiento físico es importante en todas las etapas de la vida, porque el ejercicio regular y el movimiento te ayudarán a mantener un cuerpo sano. Cuando estás jubilado, es probable que te des cuenta que tienes más tiempo para centrarte en una rutina de ejercicios. El hecho de que tengas el tiempo disponible, ¡no significa que tienes que pasar horas en el gimnasio todos los días!
Aquí hay algunos consejos para que puedas personalizar tu plan de acondicionamiento físico para que coincida con tus preferencias:
Mantenlo Simple
No hay ninguna razón para complicar excesivamente tus objetivos de acondicionamiento físico. Movimientos simples son una forma efectiva de mantener tu cuerpo fuerte y flexible. Por ejemplo, puedes considerar ir a dar un paseo todas las mañanas en lugar de iniciar una rutina rigurosa para entrenar para una maratón. Movimientos básicos pueden ayudar a aumentar tu ritmo cardíaco sin poner tus articulaciones y huesos bajo demasiada presión.
Elija una actividad que le guste
La mejor manera de mantenerte consistente con tus rutinas de acondicionamiento físico es encontrar algo que te guste. Busca clases o actividades físicas que sean divertidas. Algunas personas disfrutan jugar al golf o al tenis, mientras que a otras les resulta más agradable unirse a una clase de aeróbicos en el agua o pasear a su perro.
Habla con los centros locales de ancianos, centros de recreación, y gimnasios para ver si las clases de ejercicios para la tercera edad están disponibles. Algunos de estos centros de acondicionamiento físico tienen “zapatos deportivos plata” programas diseñados para la gente en la jubilación. Puedes unirte a la clase todos los días para tener la oportunidad de hablar con otras personas y trabajar en tu salud, al mismo tiempo.
Contrata a un Entrenador o Fisioterapeuta
¿Hay un objetivo específico de acondicionamiento físico que estás tratando de alcanzar? Si deseas completar un 5k, o te gustaría mejorar la movilidad en tus piernas después de la cirugía, debes considerar las ventajas de trabajar con un entrenador profesional. Esta persona puede personalizar tu rutina de ejercicios para coincidir con tus límites físicos. Ellos permanecerán a tu lado para guiarte durante tus sesiones de ejercicio.
Además de mantener una rutina de ejercicio regular, también es importante que tengas un plan de seguro de alta calidad para cubrir los gastos médicos. ¡Ofrecemos el seguro de jubilación que necesitas! Contáctanos hoy para obtener más información acerca de las opciones disponibles.